Podemos en esta ocasión hacer la pregunta a nuestros hermanos de las
riveras de la amazonia: ¿Es acaso que lo más q puedes aspirar a ganar es 200
soles al mes, o acaso un sueldo mínimo vital, o tal vez un sueldo de empleado
en alguna empresa privada o entidad del gobierno? ¿Será acaso estas cantidades
todo lo que puedas conseguir con tu potencial y habilidades de trabajo y
viviendo en una tierra tan rica que sólo requiere de una mano que lo transforme?
Creo que es la hora de aprender a cultivar un espíritu de superación.
Este es el momento para cambiar nuestra mente, ampliar la visión, y echar a andar ideas más ambiciosas (en el sentido más sano de esta palabra).
Será mejor contar con una visión de productividad más grande. GANA LO MÁS QUE PUEDAS PERO LÍCITAMENTE
AHORRA LO MÁS QUE PUEDAS
La excusa del no ahorro puede ser también el que no se gana lo
suficiente y el ingreso no da como para pensar ahorrar. Bien, entonces esa
realidad debe impulsarnos a salir de nuestro conformismo o ideas estrechas para
pensar en cómo podemos ganar más.
Para ganar un juego o una guerra se necesita de estrategia, lo mismo para
ganar a través de los negocios. Luego asumamos el riesgo. Es probable que se pierda
algunas veces, pero esa pérdida o fracaso debe acercarnos al éxito que
pretendemos. La enseñanza cristiana es que “Todas las cosas ayudan a bien a los
que aman a Dios”.
Quiero dejar sentado que el éxito y la superación es parte de la
naturaleza humana. Nacimos desde el vientre de nuestra madre como ganadores.
Con una buena actitud podemos emprender cosas mayores en nuestra vida y mejorar
nuestra situación económica y en toda área.
AFRIMA TU CARÁCTER
Para toda lucha o conquista se requiere valentía. El ser valientes y
esforzados debe ser parte de nuestro carácter. Muchas cosas en la vida se conseguirán
no de manera fácil sino que tenemos que armarnos de carácter. Carácter para
pasar la prueba. El dominio propio, la perseverancia, la paciencia son algunas
cualidades de carácter que requerimos para triunfar en todo emprendimiento.
Puede que en medio de tus luchas y esfuerzos seas tentado a titubear por
no ver los frutos deseados. Puede que caigas en tu ánimo al no ver los
resultados que esperes. Es entonces que necesitas carácter para que mantengas
la longanimidad o largura de ánimo para que continúes avanzando aunque la
cosecha de tu siembra tarde en llegar. Sólo la fe y la paciencia asegurarán tu
éxito y la alegría de vivir.
DAR LO MÁS QUE PUEDAS
Cuando tengas en tus manos aquello por la cual haz labrado con lágrimas,
debes dar el tercer paso, y es pensar en dar lo más que puedas.
Dar con generosidad en primer lugar a los tuyos, tu familia, y luego a
aquellos que están en necesidad y con limitaciones a tu alrededor. Luego dar en el sentido de volver a
reinvertir en tus ideas o negocios adquiriendo mejores herramientas de trabajo para
el aumento de tu productividad.
Recuerda desarrollar una cultura de ahorro y de inversión que te lleve a
formar una cadena productiva sin límites. Sueña en grande, da pasos de fe, ora, cree,
llénate de buenas promesas para ganar. Sin duda lograrás la hazaña.
Jorge Arévalo
LA CULTURA DEL AHORRO Y LA
INVERSIÓN
SERIE: VALORES PARA EL
DESARROLLO