Según la Fundación Forge el 30% de jóvenes en el Perú
perdieron su trabajo durante la cuarentena. La mayoría de estos jóvenes despedidos
eran el principal ingreso económico de sus hogares. Además el 15% ha sufrido
una reducción de sueldo.
Ese 30% se suman a la generación de los “Ninis”, es
decir, de los que ni estudian ni trabajan. Según Fipes son más de 350,000
jóvenes que no tienen que hacer ahora debido
a que entraron en crisis. Antes de la
pandemia la población de jóvenes en condición nini ya causaba alarma pues estos
sumaban más de 1.3 millones en el país.
Es lamentable tener que decirlo, pero la delincuencia, los robos y asaltos que
acontecen diariamente en nuestra ciudades tiene todas las de potenciarse. La
falta de oportunidades de empleo y de condiciones para el estudio es el caldo
de cultivo para que algunos cedan a la presión de grupo, y a la presión del hambre
y la pobreza, aunque no nos parezca justificable, es la realidad.
La pregunta es ¿qué pueden hacer estos jóvenes ante esta
grave situación? ¿Dónde queda la fuerza de las políticas de empleo juvenil?
Prevenir antes que lamentar
reza el dicho. Pues hago un llamado a todas las instituciones del país, sean
políticas, empresariales, religiosas, de familia u organizaciones sociales a trabajar
juntos en la prevención. No justifiquemos esta realidad diciendo que somos un
país pobre o que todos estamos en igual condiciones. Incentivemos en los
jóvenes más que nunca a la creatividad y el trabajo honesto.
La
Familia, un factor importante:
Los padres son los primeros promotores del trabajo en los jóvenes.
Alentemos a los hijos jóvenes que cuando una puerta se cierra, otra se abrirá,
estemos junto a ellos para ayudarlos. Pidamos al gobierno que a través del
ministerio de Educación se observe que los Cetpros (Centros de trabajo técnico
productivos) cambien su modalidad de capacitaciones cuanto antes, que todos los
cursos y carreras se hagan en línea.
Las
asociaciones
Igualmente las asociaciones
deben hacer su parte en desarrollar programas, capacitaciones, conferencias a
través de facebook live o zoom para ayudarles a continuar liberando su mente
creativa y potencial productivo.
La asociación desarrollo juvenil y prevención de
violencia que dirijo hará su parte. Por favor, pedimos que estén en
comunicación con nosotros a través de nuestra dirección: https://www.facebook.com/adjpv
Los
gobiernos locales.
Los Municipios deben estar
despiertos y a través de la Gerencia de Juventudes gestionar ante los
Ministerios del gobierno central la activación urgente de “Jóvenes productivos”
del Ministerio de Trabajo, el Programa Educativo Exportador del Ministerio de
Comercio Exterior y Turismo, el programa “Sunarp emprendedor” de la
Superintendencia Nacional de Registros Públicos y otros como la Semana de
Empleo (donde las empresas del distrito ofrecen sus vacantes para sus diferentes
rubros), la bolsa de trabajo juvenil, la
asesoría en búsqueda de empleo, el Certificado Único Laboral, el Servicio de
Orientación Vocacional e Información Ocupacional (SOVIO), y el programa “Ponte
en Carrera”.
Los padres en el hogar, los
dirigentes de las asociaciones juveniles y los alcaldes de las municipalidades juegan
un rol importantísimo como líderes y benefactores de la juventud.
Exhorto a poner todo el
mayor esfuerzo y compromiso para encauzar esta situación de desocupación juvenil
y darle la vuelta por el bien del país. Todo lo podemos en Cristo que nos
fortalece.
Los jóvenes son la fuerza
del país.
Jorge Arevalo
JA es emprendedor,
misionero, autor y conferencista internacional
Fundador y director de la
Asociación Desarrollo Juvenil y Prevención de la Violencia
