sábado, 7 de diciembre de 2019

LAS PROMESAS DE DIOS - 4 PRINCIPIOS



Cuando nos referimos a las promesas de Dios por lo general debemos observar cuatro principios:

1.      Si es una promesa condicional.

Si es condicional se cumplirá sólo si obedecemos con la condición. No podemos esperar un resultado sino obedecemos su mandato.

Ejemplo:

Efesios 6: 1-2
“Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra”
La promesa de que nos irá bien y que tendremos una vida larga sobre la tierra tiene un condicionante: “Honrar a papá y mamá”, de lo contrario no podemos esperar las bendiciones de este texto.



Hebreos 13: 5

“Sean vuestras costumbres sin avaricia, contentos con lo que tenéis ahora; porque él dijo: No te desampararé, ni te dejaré”.

En este versículo Dios promete su cuidado y provisión pero siempre y cuando abandonemos la avaricia y tengamos una actitud de contentamiento.  



2.      Si debemos reclamarla

En la Biblia encontramos promesas que debemos reclamarla, es decir, pedirle a Dios su cumplimiento en nuestra vida, es su Palabra para nosotros, su rhema, no encontramos mayores observaciones de cumplimiento por parte de nosotros.

Isaías 41: 10

“No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”

Esta promesa ha consolado y fortalecido millones de creyentes en todos los siglos. Es una de las preferidas de muchos. Aquí Dios promete que estaría con nosotros, que siempre contaríamos con su ayuda y sustento. Esto es hermoso. La palabra “siempre”, quiere decir, todo el tiempo. Debemos pedirle a Dios que cada cumpla su promesa en nosotros.


Filipenses 4: 19

“Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús”

Esta promesa de filipenses es otra de las más citadas y reclamadas. El creyente puede confiar que Dios no lo abandonará en ninguna de sus necesidades. Debemos pedirle que su provisión nunca falte.



3.      Si debemos añadir nuestras fuerzas

En Deuteronomio 8: 18 encontramos esta promesa:

“Sino acuérdate de Jehová tu Dios, porque él te da el poder para hacer las riquezas, a fin de confirmar su pacto que juró a tus padres, como en este día”

El texto enfatiza que Dios es el que nos da el poder para hacer las riquezas. No nos da las riquezas sino el poder para hacerlas. En otro texto del mismo libro encontramos:

“Te abrirá Jehová su buen tesoro, el cielo, para enviar la lluvia a tu tierra en su tiempo, y para bendecir toda obra de tus manos. Y prestarás a muchas naciones, y tú no pedirás prestado”, Deuteronomio 28: 12

Nota que dice que bendecirá la obra de tus manos, implicando que su bendición vendrá a nuestra vida a través de una acción de nuestras manos, es decir, de nuestro trabajo. En este texto está implícito el trabajo.

Pablo dijo en 2 Tesalonicenses 3: 10  que si alguno no quiere trabajar tampoco coma.  


4.      Si tenemos que esperar

También existen las promesas que no aseguran un cumplimiento inmediato sino que tenemos que esperar el tiempo de Dios para su cumplimiento.

1 Corintios 10:13

“No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar”

Muchas veces estamos pasando una dura prueba y parece de nunca acabar. Esta promesa anima a confiar en Dios puesto que dice que no nos abandonará en medio de la difícil situación por la que pudiéramos estar atravesando sino que hará un camino donde no lo hay.

2 Corintios 12: 9

“Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo”.

La promesa es que nos librará de todo mal. Que esperemos en él, en su gracia y favor para salir triunfante de la prueba.


Jorge Arévalo

jueves, 5 de diciembre de 2019

REALIDADES EN ÉL - MI AUTORIDAD EN CRISTO


Tenemos poder al afirmar nuestra identidad en Cristo, ¿Quién soy en él?, nos gozamos de sus bendiciones al declarar nuestra herencia, ¿Qué tengo en Cristo? Y vivimos como reyes en vida al pararnos firmes en la verdad de nuestra autoridad como creyentes, ¿Qué puedo hacer por medio de él?

En este capítulo conozcamos lo que los creyentes pueden hacer en Cristo:


En Cristo lo puedo todo

“Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”, Filipenses 4:13


En Cristo puedo poner mis manos sobre los enfermos y echar fuera demonios

“Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas; tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán sus manos, y sanarán”, Marcos 16: 17-18


En Cristo puedo caminar en amor

“El amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado”, Romanos 5:5  


En Cristo puedo caminar en victoria

“Mayor es el que está en mí que el que está en el mundo”, 1 Juan 4: 4


En Cristo todas las cosas me son posibles

“Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible”, Marcos 9:23


En Cristo puedo andar como rey en vida

“Pues si por la transgresión de uno solo reinó la muerte, mucho más reinarán en vida por uno solo, Jesucristo, los que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia”, Romanos 5: 17


En Cristo puedo caminar en salud

“quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados”, 1 Pedro 2: 24


En Cristo puedo caminar en su favor

“Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma”, 3 Juan 2


En Cristo puedo caminar sin temor

“Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio”, 2 Timoteo 1: 7


En Cristo puedo caminar en su paz

“Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús”

En Cristo puedo caminar en toda autoridad espiritual
“He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre toda fuerza del enemigo, y nada os dañará”, Lucas 10: 19

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Jorge Arévalo

miércoles, 4 de diciembre de 2019

REALIDADES EN ÉL - NUESTRA HERENCIA

El Nuevo Pacto contiene realidades que indican a los creyentes sobre su herencia en Cristo. Esto es importante porque cada realidad cubre necesidades primordiales de este mundo. Veamos estas realidades:


Lo que tengo en Él

“En Cristo tengo todas mis necesidades suplidas”, Filipenses 4: 19
Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.

“En Cristo tengo vida y autoridad espiritual sobre lo creado”, Efesios 2: 5-6
aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos), y juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesús,

“En Cristo tengo autoridad sobre toda fuerza del enemigo y nada puede dañarme”, Lucas 10:19
He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre toda fuerza del enemigo, y nada os dañará.

“En Cristo tengo el respaldo y protección de Dios”, Romanos 8:31
¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?

“En Cristo tengo la victoria”, 2 Corintios 2:14
Mas a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jesús, y por medio de nosotros manifiesta en todo lugar el olor de su conocimiento.

“En Cristo tengo respuesta a todas mis oraciones”, Mateo 21: 22
Y todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis.

“En Cristo tengo la gracia de Dios operando en mi vida”,  1 Corintios 3:10
Conforme a la gracia de Dios que me ha sido dada, yo como perito arquitecto puse el fundamento, y otro edifica encima; pero cada uno mire cómo sobreedifica.

“En Cristo tengo paz para con Dios”, Romanos 5:1
Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo;

“En Cristo tengo toda bendición”, Efesios 1:3
Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo,

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Jorge Arévalo

martes, 3 de diciembre de 2019

PROMESAS, REALIDADES Y PACTOS


En la Sagrada Escritura encontramos la buena Palabra para estimular nuestra vida a un avance en todas las áreas. Sólo debemos conformar nuestra mente al pensar de esta Palabra divina. Los creyentes sí lo podemos.

Empezaré con una lista de las realidades en Cristo que debemos tomarlas como un hecho, como algo ya realizado a nuestro favor. El murió en la cruz para hacerlas realidad. Dijo “Consumado es”, es decir, es un hecho. Son cosas que la Biblia dice que somos en El.



Lo que soy en Cristo

“Soy bendecido en Cristo con toda bendición espiritual de los lugares celestiales”, Efesios 1: 3

“Soy un redimido, por su sangre he recibido el perdón de pecados”, Efesios 1:7

“Soy un justificado, tengo su paz en mi corazón por medio de nuestro Señor Jesucristo”, Romanos 5:1

“Soy una criatura en Cristo, las cosas viejas pasaron y he aquí todas son hechas nuevas”, 2 Corintios 5: 17

“Soy más que vencedor por medio de él”, Romanos 8: 37

“Soy un hijo de Dios, y el Espíritu Santo me guía”, Romanos 8: 14

“Soy sano por sus llagas”, Isaías 53: 5

“Soy un miembro del cuerpo de Cristo”,  1 Corintios 12: 27

“Soy un escogido por Dios y adoptado como hijo suyo”,  Efesios 1: 3-8

“Soy templo del Espíritu Santo”,  1 Corintios 6:19

“Soy redimido de la maldición de la ley”, Gálatas 3: 13

“Soy cabeza y no cola”, Deuteronomio 28:13

“Soy santo y sin culpa delante de él”, 1 Pedro 1: 16

“Soy un victorioso”,  1 Juan 5: 4

“Soy muerto al pecado”, Romanos 6: 2-11

“Soy coheredero con Cristo”, Romanos 8:17

“Soy acepto en el Amado”,  Efesios 1: 6

“Soy crucificado con Cristo”, Gálatas 2: 20

“Soy libre de toda condenación”,  Romanos 8:1

“Soy reconciliado con Dios”, 2 Corintios 5:18

“Soy ciudadano del reino de Dios” Efesios 2: 19

“Soy nacido de Dios y el maligno no me toca”,  1 Juan 5:8

“Soy luz del mundo”,  Mateo 5:14

“Soy sal de la tierra”, Mateo 5: 13

“Soy la justicia de Dios”,  2 Corintios 5: 21

“Soy embajador de Cristo”, 2 Corintios 5: 20

“Soy creación de Dios, creado en Cristo Jesús para buenas obras”,  Efesios 2: 10

“Soy corona de su gloria  y diadema real en Su Presencia”, Isaías 62: 3

“Soy libre de la ley del pecado y de la muerte”, Romanos 8: 2

“Soy linaje escogido, nación santa, pueblo escogido por Dios “, 1 Pedro 2: 9

“Soy sabio e inteligente”, Efesios 2:8

“Soy fortalecido con todo poder conforme a la potencia de su gloria”, Colosenses 1: 11

“Soy vencedor por medio de la sangre del Cordero”, Apocalipsis 12:11

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Jorge Arévalo

ALINEA TU CONFESIÒN A LA PALABRA DE DIOS

  Descubrí claramente el poder de la palabra cuando el texto bíblico de Hebreos 4: 12 llamó mi atención acerca de sus efectos. Literalmente ...