En Lucas 12.15 Jesús dice: «Y les dijo: Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee» Jesús está hablando en este versículo de la avaricia. Dentro de este concepto están implícitos por lo menos tres puntos: La avaricia como el afán o deseo desordenado de poseer bienes, como una enfermedad del ahorro, y como mal propósito de vida. Analicemos estos tres puntos: La avaricia es el afán o deseo desordenado de poseer bienes La avaricia tiene una relación muy estrecha con la codicia, porque codiciamos cuando deseamos desmedidamente dinero, poder y cosas materiales. Y con este fin el avaro toma pasos concretos para poseer estas riquezas sin que le importe el abuso que esto pueda representar para otros seres humanos. Por tal razón es frecuente también que la avaricia aparezca vinculada con otros pecados o delitos como la traición, la estafa y el soborno. El avaro sólo pretende sumar más y m