sábado, 16 de junio de 2018

EL PENSAR BIEN Y MAL (II)

Efesios 1 versículos 7 y 8 dice: en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia”.

Este versículo dice que en Cristo somos redimidos ¿De qué somos redimidos? El libro de Gálatas 3 versículo 13 dice, "Cristo nos redimió de la mal­dición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero)”. Kenneth Hagin enseña aquí: “Hemos mirado a la ley y hemos encontrado que el castigo por quebrantar la ley de Dios es triple: La pobreza, las enfermedades, y la muerte, es decir, la muerte espiritual”. Por lo tanto, el pecado, la enfermedad y la pobreza ya no pueden enseñorearse de nosotros. ¿Por qué? Porque hemos sido redimidos en Cristo.

"La creencia y la confesión diaria de lo que Jesús hace ahora a su favor a la diestra del Padre, y lo que Dios le ha hecho en Cristo, edificarán una vida sólida de fe, crecerá hasta no temer las circunstancias, ni ninguna enfermedad, ni ninguna condición. Se enfrentará a la vida sin miedo, será un vencedor".


Dos testimonios:

Donald Gee, escritor del libro el “Espíritu de Temor” escribe así: Parece que 105 hombres de su familia tenían la tendencia a morir temprano, alcanzando unos treinta y ocho años, más o menos. Les daba alguna enfermedad a los pulmones. Por eso tenía él un creciente temor a esto y cada resfrío o catarro le recordaba la enfermedad. Fue al médico, quien se dio cuenta de este gran temor. Le dijo al paciente que al abrigar este temor, abría su sistema a esa enfermedad, que este temor le hacía más susceptible a ella. Cuando tenía treinta y dos años, Donald Gee recibió el Espíritu San­to, y Dios le reveló la Escritura de que Él no nos ha dado espíritu de temor. Comenzó a resistir al diablo y se apoyó en la Palabra de Dios. Ahora tiene setenta y ocho años”  (en ese entonces).

El doctor John G. Lake fue misionero al África por muchos años. No tenía salario, y Dios suplía sus necesidades de maneras asombrosas. La contagiosa y mortífera plaga bubónica invadió su región y morían por centenares. El doctor cuidaba a los enfermos y enterraba a los muertos. Por fin los ingleses enviaron un vapor con médicos, medicinas y materiales. Los médicos invitaron al misionero abordo. Sabiendo que hacía tiempo que estaba en la región, querían saber por qué no le habla dado la plaga. Este respondió: "Señores, creo que la Ley de la Vida en Cristo Jesús me ha librado de la Ley del Pecado y de la Muerte (Romanos 8 versículo 2), y mientras ando en la luz de esa Ley de Vida, ninguna enfermedad ni ningún microbio puede prenderme.  Los médicos le rogaron que tomase uno de los remedios preventivos que tenían. Este respondió: "Señores, puede ser que les interese un experimento. Observarán que los que contraen la plaga mueren con convulsiones, echando de la boca una espuma sangrienta. Si ponen esa espuma debajo de un microscopio, hallarán que contiene millones de microbios vivos, los cuáles sobreviven por algún tiempo. Tomaré de esta espuma sangrienta y pondré la mano bajo el microscopio, y verán que todo microbio que toca mi piel muere. Los doctores estuvieron de acuerdo e hicieron la prueba. Era verdad, los microbios morían al tocar su piel”.

Espero que los testimonios de poder presentados aquí levante su fe en Dios para creer por su sanación de cualquier enfermedad o dolencia, o creer en un milagro financiero y alcanzar victoria ante cualquier adversidad por la que puede estar pasando. Jesús hablando de la fe en Dios dijo: “para el que cree todo lo es posible” (Marcos 9:23).

Del libro “Destinados al éxito”
Autor: Jorge Arévalo

viernes, 15 de junio de 2018

EL PENSAR BIEN Y MAL (I)

Muchos sabemos que nuestra forma de pensar determina la forma de creer y la forma de creer determina nuestra manera de vivir. “Porque cuál es su pensamiento en su corazón, tal es él” dice Proverbios 23 versículo 7.

El pastor americano Kennet Hagin en su libro “El Pensar Bien y Mal”, del cual voy a basarme para este tema, refiriéndose a nuestra confesión diaria nos comenta: “Si pensamos mal, creemos mal. Si nuestra creencia es errónea, nuestra confesión lo será también. Es decir, nuestras palabras serán erróneas como resultado de nuestra manera de pensar. La Palabra de Dios nos es dada para corregir nuestro modo de pensar”.

Pablo, el apóstol nos dice en Romanos 12: 2 "No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cual sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta" (Romanos 12:2). Y en 2 Corintios 10: 5  "Derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo".

Confesión. Definición

Hagin define la confesión de la siguiente manera: Primero, es afirmar algo que creemos; segundo, es declarar algo que sabemos; tercero, es testificar de una verdad que hemos abrazado. En el cristianismo  la confesión tiene una gran importancia porque es la afirmación de algo que creemos, la declaración de algo que sabemos, y el testimonio de una verdad que hemos abrazado.

El escritor de Hebreos en el capítulo 4 versículo 14 dice que “es necesario que retengamos nuestra profesión” (equivalente a confesión). Y en el 10:23 declara: "Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión (confesión) de nuestra esperanza (porque fiel es el que prometió)."

Lo que debemos saber

El pastor Hagin nos relata en su libro lo que debemos conocer como cristianos: Primero, es menester que sepamos lo que Dios nos ha hecho en Cristo y que lo creamos y lo confesemos. Es nuestra confesión de ello lo que crea la realidad, y entonces se hace real en nuestra vida.

Segundo, necesitamos saber lo que Dios ha hecho en nosotros por Su Palabra y por el Espíritu Santo.
Tercero, es preciso que sepamos lo que el Señor Jesucristo está haciendo por nosotros en Su ministerio de hoy a la diestra de Dios el Padre en los cielos.

Y Cuarto, es necesario que sepamos lo que la Palabra de Dios hará por nosotros a través de nuestros labios, o lo que Dios puede hacer por medio de nosotros.

Lo que el Señor Jesús está haciendo por nosotros

En el caso del tercer punto Hagin dice que es preciso que sepamos lo que el Señor Jesucristo está haciendo por nosotros en Su ministerio de hoy a la diestra de Dios el Padre en los cielos. Él dice al Padre: "Por ellos morí; llevé sus pecados; los redimí; fui hecho pecado por su pecado, para que en Mi puedan ser hechos justicia de Dios; lleve sus dolencias y sus enfermedades. Yo los libré de la autoridad de las tinieblas; los engendré, haciéndolos criaturas nuevas.»

Hebreos 4 versículo 14 dice: " Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra profesión"

Lo que Dios ha hecho en Cristo

Es el punto que nos lleva al hecho de observar en las epístolas de Pablo las expresiones: "en Él," "en Quien," y "en Cristo». Ejemplo:

II Corintios 5:17: "De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es…»

Un creyente en Cristo es una nueva criatura, es como un colchón nuevo no arreglado. Un creyente en Cristo tampoco es un ser reformado sino es algo que jamás ha sido. Según una traducción: "Es un género nuevo." Es decir, algo que no había existido antes. Entonces somos más que pecadores perdonados, débiles, o deplorables miembros de la iglesia, somos nuevas criaturas en Cristo Jesús.

Hagin testifica de un amigo que quiso recordarle su vieja vida “Inmediatamente él empezó a hablar de las cosas que habíamos hecho antes de que me hiciese creyente y antes de mi enfermedad. Él hablaba y se reía de estas cosas, mas yo estaba sentado allí como si llevara una máscara, como si no supiera ni jota de lo que hablaba. Por fin, me dijo: "¿Qué te pasa? ¿No recuerdas estas cosas?" Yo le respondí: "No recuerdo nada". "Tú estás como si no entendieras lo que digo." Se rió de otra fechoría que habíamos llevado a cabo y volvió a preguntar: "¿No recuerdas? « Respondí: "Oye, el individuo que estaba contigo aquella noche murió. Ha muerto". Ahora es una nueva criatura.

Del Libro “Destinados al éxito”
Autor: Jorge Arévalo

jueves, 14 de junio de 2018

EL PODER DE LA PACIENCIA

Hoy en día vivimos en un mundo violento, rápido y furioso. La tecnología y el progreso de las comunicaciones nos han traído enormes beneficios y comodidades pero al mismo tiempo han hecho casi desaparecer la paciencia y la serenidad como virtud entre los hombres.  

Hoy todo se demanda con urgencia, hoy todo se quiere al instante. Palabras como: «Te mandé un email y no me contestaste», «Te llamé a tu celular varias veces y no me respondiste». «Pedí el café y aún no me atienden»,  suenan más que «ok, espero», «Mantengo la calma», «Confío que hará».

 ¿Qué es la paciencia?

Es la actitud  que lleva al ser humano a poder soportar contratiempos y dificultades para conseguir algún bien. Es la virtud de quienes saben sufrir y tolerar las contrariedades y adversidades con fortaleza y sin lamentarse. También es aquello que las personas necesitan en mucho casos para mantenerse estable en un momento determinado.

La paciencia es la actitud  que lleva al ser humano a poder soportar contratiempos y dificultades para conseguir algún bien.

Quién dijo que la paciencia es la madre de la ciencia no estaba equivocado. Pues, los más grandes descubrimientos e invenciones de la historia se deben no al talento de sus genios sino a su paciencia. La paciencia siempre fue, y continúa siendo el secreto de los genios. Alguien observó que no hay nada en el mundo que reemplace la paciencia, el talento no la reemplaza, no hay nada más común que hombres talentosos sin éxito.  La educación no la reemplaza, hay muchos educados fracasados.

«Si he hecho descubrimientos invaluables ha sido más por tener paciencia que cualquier otro talento», Isaac Newton

"Con la paciencia y la tranquilidad se logra todo… y algo más», Benjamín Franklin

La paciencia es la virtud de quienes saben sufrir y tolerar las contrariedades y adversidades con fortaleza y sin lamentarse

La Biblia nos pone como uno de los ejemplos de paciencia a Job quién sufrió y toleró todas las adversidades que le acontecieron en su vida pero que nunca se lamentó ni maldijo a Dios por ello. El Señor tuvo misericordia de él y le recompensó su paciencia e integridad restaurando al doble todas las cosas que había perdido y le añadió muchos más años de vida.

Santiago 5: 11 dice: «He aquí, tenemos por bienaventurados a los que sufren. Habéis oído de la paciencia de Job, y habéis visto el fin del Señor, que el Señor es muy misericordioso y compasivo»

De acuerdo con la tradición filosófica,  la paciencia es la constancia valerosa que se opone al mal, y a pesar de lo que sufra el hombre no se deja dominar por él. «sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia, mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna», Santiago 1:3-4

La paciencia es aquello que las personas necesitan en mucho casos para mantenerse estable en un momento determinado

Una historia hebrea tradicional, cuenta que Abraham estaba sentado afuera de su tienda una noche cuando vio a un hombre viejo, cansado por su edad y jornada, caminando hacia él.  Abraham se levantó y corrió para saludarle y le invitó a llegar a su tienda.  Allí Abraham lavó los pies del viejo hombre y le dio comida y bebida.

El viejito inmediatamente empezó a comer sin orar o declarar una bendición alguna.  Así que Abraham le preguntó, “No adora usted a Dios?” El viajero viejo le respondió diciendo, “Yo adoro solamente al fuego y no tengo reverencia hacia ningún otro dios.” Cuando Abraham escuchó esto se molestó bastante y agarró al viejo por los hombros y lo echó fuera de su tienda al aire frío. Cuando el viejito había partido del lugar, Dios llama a su amigo Abraham y le pregunta donde estaba el viejo extranjero.  Abraham replicó, “Yo le eché fuera porque no te adoraba”. Dios contesta, “He sufrido a este viejito por unos ochenta años a pesar de que me deshonra.  ¿No pudiste tu aguantarle una sola noche?” 

«La paciencia vence toda resistencia, la cortesía vence toda oposición», Proverbios 25:15

«El mejor fuego no es el que se enciende rápidamente»,  Georgie Eliot

Del Libro “Destinados al éxito”
Autor: Jorge Arévalo
Sección: Carácter y personalidad

miércoles, 13 de junio de 2018

EL USO MÁS AMPLIO DE LA PALABRA AMÉN

"Te exaltaré, alabaré tu nombre, porque has hecho maravillas; tus consejos antiguos son verdad y firmeza (emuná omén, literalmente, "fidelidad y seguridad") Isaías 25:1. 

Como vemos en este versículo la palabra amén se deriva de la descripción de que él es digno de confianza, Él es fiel. Generalmente nosotros usamos el amén solo para cerrar la oración, pero la palabra AMÉN la podemos usar de manera más amplia. Veamos algunos casos:

PARA ASEGURAR EL ÉXITO. El jefe de los siervos de Abraham atribuyó su éxito en la búsqueda de esposa para el joven Isaac a la fidelidad de Dios. (Génesis 24: 27).

PARA ESTAR TRANQUILOS ANTE CUALQUIER CIRCUNSTANCIA. El Señor muestra su fidelidad de estar contigo en toda circunstancia, porque El guarda sus promesas: "Conoce, pues, que Jehová tu Dios es Dios, Dios fiel, que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos, hasta mil generaciones" (Deuteronomio 7:9).

PARA ANDAR CON SEGURIDAD DE LA VICTORIA. Josué exclamó al final de su vida que el Señor nunca le había fallado en una sola promesa (Josué 23: 14).

PARA SER GUARDADOS DEL MAL. Ni siquiera el pecado y la maldad podrán contra tí porque grande es su fidelidad.  "Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es su fidelidad" (Lamentaciones 3: 2-23).

PARA PROTECCIÓN EN MEDIO EN MEDIO DE LAS TENTACIONES O PRUEBAS. “No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar. (1 Corintios 10:13).

PARA CUMPLIR SUS PROMESAS Y SU PROPÓSITO EN TÍ. "Por lo cual, queriendo Dios mostrar más abundantemente a los herederos de la promesa la inmutabilidad de su consejo, interpuso juramento" (Hebreos 6:17). Si alguna vez Dios dejara de cumplir sus promesas, estaría repudiando su propia personalidad.

“Porque todas las promesas de Dios son en él Sí, y en él Amén, por medio de nosotros, para la gloria de Dios” (2 Corintios 1:20).

Declaración matutina de confianza y poder: 

Hoy es el día para que declares el “Amén de Dios” por todas sus preciosas y grandísimas promesas. Hoy es el día de tu bendición. 2018 es el año de la gracia y el favor de Dios sobre tu vida. Tu familia es prosperada, en tu casa no falta el aceite, Dios bendice tu pan y tus aguas. Vienes a ser cabeza y no cola. Estás lejos de opresión porque no se acercará a ti, tienes paz como un río, nada ni nadie puede hacerte daño. Aunque un ejército acampe contra ti no temerás, aunque contra ti se levante guerra, tú estarás confiado.

Dios es tu Jehová Nissi, tu líder, tu capitán guerrero que abre puertas de oportunidades para ti y abre sus cielos en este día para derramar sus bendiciones hasta que sobreabunden sobre tí. ¿Puedes decir amén? ¿Puedes confiar que Dios hace sus proezas por tí en este día y holla a tus enemigos, pobreza, enfermedad, pecado y muerte? Hoy es el día de tu victoria. Hoy eres más que vencedor en Cristo. Jehová es tu luz y salvación y  es la fortaleza de tu vida. Amén y amén.

Del libro “Destinado al éxito”
Autor: Jorge Arévalo
Sección: Fe y espiritualidad.

martes, 12 de junio de 2018

MANEJO DE SENTIMIENTOS Y EMOCIONES


¿Cómo manejas tus emociones en un conflicto interpersonal? Cuando surge el conflicto, el desacuerdo o  situaciones en que somos propensos a caer en ira. ¿Cómo nos libramos de ella?
En primer lugar definamos lo que es un conflicto. Un conflicto es una situación en la que dos o más personas no están de acuerdo con el modo de actuar de un individuo o un grupo. Así como el amor es un sentimiento positivo. La ira es un sentimiento negativo que hay que aprender a controlarlo.  Actuar con ira hacia alguna persona puede cambiar en segundos su vida para siempre, es decir, puede destruirla, ya sea por una palabra hiriente, humillante o por acciones violentas que luego podemos lamentar.

Los conflictos pueden surgir cuando existe una percepción falsa o idea equivocada de la otra persona o grupo, cuando hay falta de comunicación e información manipulada por el chisme. Es entonces, cuando debemos preocuparnos por buscar las soluciones. 
¿Cómo solucionar los conflictos?
1.       Desde la perspectiva cristiana.
Jesús declaró en Mateo capítulo 5: versos 38- 48: «Oísteis que fue dicho: ‘Ojo por ojo y diente por diente´. Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra; al que quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa; a cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, ve con él dos. Al que te pida dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo niegues. Oísteis que fue dicho: ‘Amarás a tu prójimo y odiarás a tu enemigo´. Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os ultrajan y os persiguen, para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos y llover sobre justos e injustos. Si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen también lo mismo los publicanos? Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿No hacen también así los gentiles? Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto»
De esta declaración podemos recoger varios consejos como la no resistencia, la retirada, la prudencia en mantener la calma, la prudencia en las palabras o no hablar si estás enojado. 
Otro texto bíblico en Romanos 12: 17-21 Pablo el apóstol sugiere:
«No paguéis a nadie mal por mal; procurad lo bueno delante de todos los hombres. Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres. No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios, porque escrito está: ‘Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor´. Así que si tu enemigo tiene hambre, dale de comer; si tiene sed, dale de beber, pues haciendo esto, harás que le arda la cara de vergüenza. No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal» (Ro. 12:17-21).
Como se puede apreciar en el texto, la recomendación es a no responder mal por mal sino al contrario antes bendecir. Estar en paz con el prójimo es lo mejor. No vengarse y más bien optar por mirar la necesidad del otro y servirle.  

2.       Desde una perspectiva psicológica (recomendaciones): 
Consejos extraídos del libro de Napoleón Hill: Piensa en grande

·         Mantente fresco cuando otros estén furiosos, o espera a calmarte antes de hablar.
·         No hagas ni digas nada que pueda herir o hacerle daño a otra persona.
·         Recuerda que cada discusión tiene al menos tres puntos de vista: el tuyo, el del otro y los de terceros, los cuales probablemente están más cerca de la objetividad.
·         Establece el hábito de hacer preguntas y, sobre todo, de escuchar las respuestas.
·         Ten presente que si toleras a los demás, ellos también serán pacientes contigo en los aspectos no muy gratos de tu personalidad.
·         El verdadero líder sabe reconocer sus errores y aceptar responsabilidad.
Estos consejos coinciden mucho con las recomendaciones de los textos cristianos. Entonces, queda en tus manos el obrar bien y no mal ante cualquier situación que pretenda sacarte de quicio. 
Buen día.
Jorge Arévalo
Sección: Juventud y habilidades para la vida
“Manejo de emociones”

lunes, 11 de junio de 2018

CONSEJOS PRÁCTICOS PARA MANTENER LA PAZ



“Un día de furia “(Falling Down es su título original) es una película sobre la tensión y la frustración que genera en muchas personas la vida moderna en las grandes ciudades. El personaje protagonista del filme decide enfrentarse a las adversidades, y lo hace de forma violenta.

Responder a las adversidades de forma violenta, con palabras ásperas, hirientes en las que abundan el insulto y la recriminación no es la manera para solucionar nuestros problemas.

La Biblia nos dice cómo debemos hacerlo: «La suave respuesta aparta el furor, más la palabra hiriente hace subir la ira», Proverbios 15: 1. Si el furor se levanta como una tormenta, la palabra suave dispersará  las nubes y hará salir el sol, y llegará la calma y la tranquilidad.

El uso de palabras suaves es el mejor remedio para mantener la paz

Mario Javier Moreno, consejero  nicaragüense, nos comenta: «Cuando las personas tienen diferencias en cualquier cosa, que llegan a tener una discusión muy fuerte, la suave respuesta hace calmar la furia de la otra persona, y ya no llegan a pleito, sino que pueden platicar amenamente. Pero si contestamos de la misma manera que la otra persona nos está hablando, por ejemplo “si ella grita, o si alza la voz, y yo también hago lo mismo”, entonces habrá pleito y una discusión muy acalorada, que puede llegar hasta los insultos y golpes»

Dos consejos en el trato con los demás:

1. “PACIENCIA”- Para soportar el ardor de la ira ajena sin contagiarse de ese ardor. Deje que la otra persona se desahogue no interrumpirle, ya que si lo hacemos se enojara más.

2. “SUAVIDAD”- Una vez que se nos dé la oportunidad de presentar nuestras razones, debemos hablar de manera suave, sin pasión ni provocación, una palabra suave ablanda los ánimos más duros y prevalece sobre los más airados hombres.

Eclesiastés 10:4 recomienda: «Si tu jefe se enoja contigo, ¡no renuncies a tu puesto! Un espíritu sereno puede superar grandes errores» NTV

Ejemplos bíblicos:

José es uno que habló de manera suave y dulce a sus atemorizados hermanos, Gen.50:21 dice: «No, no tengan miedo. Yo seguiré cuidando de ustedes y de sus hijos. Así que hablándoles con ternura y bondad, los reconfortó».

Gedeón es otro que habló suavemente cuando lo criticaron duramente calmando de esa manera el enojo de sus hermanos,  Jueces.8:1-3: «…Cuando los hombres de Efraín oyeron la respuesta de Gedeón, se calmó su enojo» NTV

Dentro del hogar, el apóstol Pedro aconseja que cuando el esposo se enoja contra su esposa y la insulta con palabras ásperas y hasta le grita, la esposa como buena cristiana debe ser amable, tierna y serena con él, para poderlo ganar para Cristo, 1 Pedro 3:4. Igualmente el esposo, cuando su esposa se enoja, él debe ser amable y tierno con ella, no debe ser áspero,  Colosenses 3:19. Los hijos deben ser obedientes a los padres y si los padres le gritan o lo insultan ellos deben amables y respetar a sus padres en todo,  Colosenses 3:20.

La palabra suave ayuda a arreglar los problemas en el matrimonio, familia o trabajo. Contribuye a que no haya contiendas y pleitos. Las palabras suaves nos libran de la adversidad y el peligro.

Del libro “Destinados al éxito”
Autor: Jorge Arévalo

domingo, 10 de junio de 2018

5 INGREDIENTES PRÁCTICOS PARA VIVIR UNA VIDA FELIZ


Si quieren gozar de la vida y vivir una vida feliz, dejen de hablar mal de otros y de andar diciendo mentiras; aléjense del mal y hagan lo bueno, y procuren vivir siempre en paz, (Salmos 34:12-14, TLA).

La receta para una vida feliz contiene cinco ingredientes según el autor de este Salmo, el rey David. Veámoslo:

No andar hablando mal de otros (vs 13ª)

Este consejo no es tan fácil de aplicarlo en la vida, en vista de la tendencia propia del ser humano de ponerse por encima del prójimo, de mostrarse superior al otro a costa de hablar mal de la persona.

Jesús dijo en Lucas 6:37: “No juzguéis, para que no seáis juzgados”. Lo que Jesús condenó aquí en este versículo, es una condenación que no perdona: un espíritu hipercrítico, farisaico y vengativo que busca continuamente descubrir las faltas de los demás al tiempo que pasa por alto los pecados propios. La advertencia de Jesús contra este tipo de juicio hace hincapié en que cualquier medida que usemos para juzgar a otras personas será usada contra nosotros. Él dijo: "Porque con la medida con que midáis, se os volverá a medir", Lucas 6:38.

No decir mentiras de nadie (vs 13b) 

Este hecho de decir mentiras de su prójimo es muy reprobable en la sociedad misma, hasta tiene penalización. No se puede fácilmente atentar contra la honra de alguien sólo porque que no le cae, o tiene algo que le apetece o por cualquier otra razón. La Biblia condena duramente este acto malévolo, codicioso, vengativo hacia el semejante.

Alejarse del mal (vs 14ª)

Si se quiere gozar de la vida y ser feliz uno debe alejarse de todo mal. Nadie está libre de cometer errores, esto es cierto. La idea de este Salmo es alejar el pie del barro, limpiarse los zapatos y enrumbar la senda. Esto se conoce como arrepentimiento en la Biblia. Un cambio de mente. Decidir vivir de manera honesta e íntegra traerá su buena recompensa.

¿Qué es lo malo que te está afectando?  Aléjate pronto de ese mal antes que te quedes perdido en un camino sin retorno.

Hacer lo bueno (vs 14b)

Hay mucho más por hacer de lo bueno que lo malo en este mundo. Como seres creados a imagen y semejanza de Dios tenemos una capacidad innata de ser creativos. Bien, usemos nuestro raciocinio para proyectar un trabajo de bien con que podemos contribuir a la salvación de nuestro prójimo.

Procurar vivir siempre en paz con todos (vs 15c)

Es lo ideal de Dios para sus hijos. Una de las bienaventuranzas que Jesús enseñó es la de ser “pacificadores”. En un mundo de tanto conflicto y violencia, esto de ser pacificadores es como ser bomberos que apagan incendio.  Una familia para ser fuerte necesita un líder cabeza de hogar que establezca la paz, igual un pueblo o nación próspera necesita un líder que tiene una ideología de paz para que respete los derechos básicos del ser humano que es la vida, la libertad y propiedad.

Para gozar de la vida y vivir una vida feliz el rey David nos aconseja procurar vivir siempre en paz. Esto implica también estar libres de deudas y evitar todo otro tipo de opresiones en la vida.

Estamos destinados al éxito.

Jorge Arévalo
Sección: Fe y espiritualidad
Extracto del Libro “Destinados al éxito”.

ALINEA TU CONFESIÒN A LA PALABRA DE DIOS

  Descubrí claramente el poder de la palabra cuando el texto bíblico de Hebreos 4: 12 llamó mi atención acerca de sus efectos. Literalmente ...