Hoy en día vivimos en un mundo violento, rápido y furioso. La tecnología
y el progreso de las comunicaciones nos han traído enormes beneficios y
comodidades pero al mismo tiempo han hecho casi desaparecer la paciencia y la
serenidad como virtud entre los hombres.
Hoy todo se demanda con urgencia, hoy todo se quiere al instante.
Palabras como: «Te mandé un email y no me contestaste», «Te llamé a tu celular
varias veces y no me respondiste». «Pedí el café y aún no me atienden»,
suenan más que «ok, espero», «Mantengo la calma», «Confío que hará».
¿Qué es la paciencia?
Es la actitud que lleva al ser humano a poder soportar
contratiempos y dificultades para conseguir algún bien. Es la virtud de quienes
saben sufrir y tolerar las contrariedades y adversidades con fortaleza y sin
lamentarse. También es aquello que las personas necesitan en mucho casos para
mantenerse estable en un momento determinado.
La paciencia es la
actitud que lleva al ser humano a poder soportar contratiempos y
dificultades para conseguir algún bien.
Quién dijo que la paciencia es la madre de la ciencia no estaba
equivocado. Pues, los más grandes descubrimientos e invenciones de la historia
se deben no al talento de sus genios sino a su paciencia. La paciencia siempre
fue, y continúa siendo el secreto de los genios. Alguien observó que no hay nada en el mundo que reemplace la paciencia,
el talento no la reemplaza, no hay nada más común que hombres talentosos sin
éxito. La educación no la reemplaza, hay muchos educados fracasados.
«Si he hecho descubrimientos invaluables ha sido más por tener paciencia
que cualquier otro talento», Isaac Newton
"Con la paciencia y la tranquilidad se logra todo… y algo más»,
Benjamín Franklin
La paciencia es la
virtud de quienes saben sufrir y tolerar las contrariedades y adversidades con fortaleza
y sin lamentarse
La Biblia nos pone como uno de los ejemplos de paciencia a Job quién
sufrió y toleró todas las adversidades que le acontecieron en su vida pero que
nunca se lamentó ni maldijo a Dios por ello. El Señor tuvo misericordia de él y
le recompensó su paciencia e integridad restaurando al doble todas las
cosas que había perdido y le añadió muchos más años de vida.
Santiago 5: 11 dice: «He aquí, tenemos por bienaventurados a los que
sufren. Habéis oído de la paciencia de Job, y habéis visto el
fin del Señor, que el Señor es muy misericordioso y compasivo»
De acuerdo con la tradición filosófica, la paciencia es la
constancia valerosa que se opone al mal, y a pesar de lo que sufra el hombre no
se deja dominar por él. «sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia, mas tenga
la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales,
sin que os falte cosa alguna», Santiago 1:3-4
La paciencia es aquello que las personas
necesitan en mucho casos para mantenerse estable en un momento determinado
Una historia hebrea tradicional, cuenta que Abraham estaba sentado
afuera de su tienda una noche cuando vio a un hombre viejo, cansado por su edad
y jornada, caminando hacia él. Abraham se levantó y corrió para
saludarle y le invitó a llegar a su tienda. Allí Abraham lavó los
pies del viejo hombre y le dio comida y bebida.
El viejito inmediatamente empezó a comer sin orar o declarar una
bendición alguna. Así que Abraham le preguntó, “No adora usted a
Dios?” El viajero viejo le respondió diciendo, “Yo adoro solamente al fuego y
no tengo reverencia hacia ningún otro dios.” Cuando Abraham escuchó esto se
molestó bastante y agarró al viejo por los hombros y lo echó fuera de su tienda
al aire frío. Cuando el viejito había partido del lugar, Dios llama a su amigo
Abraham y le pregunta donde estaba el viejo extranjero. Abraham
replicó, “Yo le eché fuera porque no te adoraba”. Dios contesta, “He sufrido a
este viejito por unos ochenta años a pesar de que me deshonra. ¿No
pudiste tu aguantarle una sola noche?”
«La paciencia vence toda resistencia, la cortesía vence toda oposición»,
Proverbios 25:15
«El mejor fuego no es el que se enciende rápidamente», Georgie
Eliot
Del Libro “Destinados al éxito”
Autor: Jorge Arévalo
Sección: Carácter y personalidad
Comentarios
Publicar un comentario