La fórmula para la
bendición económica nacional es: Recursos Naturales+ Energía Humana x herramientas = Estado material del hombre.
Expresado en forma simple, el bienestar material del hombre es un producto de los recursos naturales mezclados con la energía humana y unidos con el uso de herramientas. El Sr. Wolfe representa esto con la siguiente fórmula: R.N. + E.H x H = B.M.H (Recursos Naturales + Energía Humana x Herramientas = Bienestar Material del Hombre).
Recursos Naturales Abundantes
Dios creó al hombre
y supo que tendría ciertas necesidades básicas, como alimento, vestido y
albergue. Dios creó todo lo necesario para satisfacer estas necesidades para
ese fin Dios creó los recursos naturales.
Los hombres con una
visión mundial cristiana creen que Dios ha provisto todo lo que necesitan y consecuentemente, tienen fe en buscar, encontrar
y procesar los abundantes recursos
naturales.
Energía Humana
Dios no solamente
creó los recursos naturales, sino que también creó al hombre con energía
humana. Dios le dijo que tomará dominio y gobernará la tierra, Génesis 1:26. El hombre fue puesto
en el Jardín del Edén para cultivarlo y conservarlo, lo cual requería trabajo,
Génesis 2:15. Después de la caída,
el cultivar el campo requirió el “sudor de la frente” (del hombre) adicional,
Génesis 3:19.
En una sociedad cristiana,
los hombres serán inspirados por Dios para trabajar; además, en una
nación con libertad económica, los hombres serán capaces de participar de los
frutos de sus labores, lo cual los animará a aplicar más energía.
Herramientas
Desde el principio,
el hombre fue incapaz de cultivar la
tierra y gobernar y ni aún de
satisfacer bien sus propias necesidades con sólo sus manos desnudas.
El Señor Wolfe
escribe que el hombre “para tomar los recursos naturales que Dios ha creado y
transformarlos en comida, vestido y abrigo” para satisfacer sus necesidades,
fueron necesarias las herramientas para ayudarle a “cultivar el suelo, derribar
árboles y cortar madera, extraer y refinar minerales y atender las ovejas y
tejer la lana.” Conociendo esto, Dios dio al hombre “ideas para inventar y
construir herramientas.”
Al hombre le fue
dada “inteligencia y fortaleza física,” esto es “energía mental y muscular”
para tomar los recursos naturales y crear herramientas para satisfacer sus
necesidades. El hombre ha
utilizado herramientas desde el principio; Adán y Caín fueron agricultores y
ambos usaron herramientas simples (posiblemente una estaca para excavar o un
arado sencillo) y algún tipo de hoz o herramienta de corte para cosechar el
grano. Abel fue un pastor y de la misma manera tenía una vara y un bastón.
La Biblia tiene
muchas referencias a las herramientas. Wolfe expresa que estas incluyen
“martillos, hachas....arados tirados por bueyes, piedras para moler grano...
hornos para refinar plata y oro y hornos y cacerolas para amasar y freír.”
Las herramientas son un factor multiplicador en la
ecuación del bienestar material del hombre.
Wolfe escribe al
respecto: “La utilidad de cada herramienta es medida por la cantidad de tiempo
y energía que ahorra y por el incremento en la cantidad y/o la calidad de los
bienes y servicios que pueden producirse con su uso.”
Haz click en el video: "Cómo mejorar el nivel de vida". En este link, el
Dr. Manuel Ayau, fundador de la Universidad Francisco Marroquín de Guatemala nos
revela cómo los avances en las herramientas agrícolas ha producido progreso
económico.