Los escritores del Antiguo Testamento de las Sagradas Escrituras usan
varias palabras en el hebreo original para referirse al pensamiento general de
«liberación» o «salvación», ya sea en su forma natural, legal o espiritual.
Analicemos dos de estas palabras: Natsal y Yashá y una palabra también del Nuevo: Sódzo.
Natsal.
Natsal aparece 212 generalmente con el significado de «libertar» o
«rescatar». Exodo 3:8 Dios le dice a Moisés que Él había descendido para «rescatar» a
Israel de mano de los egipcios.
2 Crónicas 32:17 Senaquerib le escribió al rey Ezequías: «Los dioses de
las naciones de los países no pudieron librar a su pueblo de mis
manos, tampoco el Dios de Ezequías librará al suyo de mis manos»
En el Salmos 22:21; 31:17; 69:14; 71:2; 140:1 El salmista clama pidiendo
a Dios que lo rescate. Y en el Salmos 39:8 David clama a Dios para que
lo salvara de todas sus transgresiones.
Yashá
Yashá aparece 354 veces más en los salmos y en los libros proféticos. Y
significa «salvar», «liberar», «dar la victoria», o «ayudar».
En Éxodo 14:30; Deuteronomio 20:4; Jueces 3:9; Jeremías 17:14-18 vemos
que Dios libra a su pueblo de sus enemigos. En 2 Crónicas 20:9, los libra de
calamidades (plaga o hambruna).
Ezequiel 37:23 Los salva de sus rebeliones. «Y los salvaré de
todas sus rebeliones con las cuales pecaron y los limpiaré»
Sódzo
En el Nuevo Testamento se usa el verbo sódzo para referirse al
mismo pensamiento de «liberación» o «salvación». Significa
"salvar", "conservar", o "rescatar del peligro".
Mateo 8:25; Hechos 27: 20,31 Sódzo se refiere a salvar a
alguien de la muerte física y en Mateo 9: 22; Marcos 10:52; Lucas 17:19;
Santiago 5:15 a salvar de una enfermedad física.
En Lucas 8:36, libera de la posesión demoníaca y en Lucas
8:50, salva de una muerte que ya ha tenido lugar.
¿Qué tipo de salvación o liberación requieres tú en este tiempo? Dios
tiene la mesa servida para ti. Él es tu Dios Natsal que te liberta y te
rescata. Él es tu Dios Yashá que te salva, que te da la victoria y te ayuda. Y Él
es tu Dios Sódzo que te conserva y rescata del peligro de la muerte física o de
una grave enfermedad.
No hay motivo para temer, teniendo un Dios grandioso y Todopoderoso que
reina en todo el Universo y que tu vida la tiene en sus manos. Queda confiar y
creer en él para las grandes cosas que prometió en su Palabra. Él es tu Salvador,
tu libertador, que perdona los pecados, que sana y rescata del hoyo tu vida,
que te da vida y aliento para que alcances toda su bendición en esta vida.
Con los significados de estas grandes palabras de salvación y rescate puedo entonces afirmar categóricamente que estás destinado al éxito.
Jorge Arévalo
Sección: Fe y espiritualidad
Extracto del Libro: “Destinados al éxito”
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