Hebreos 11: 1
define lo que es la fe:
“Es, pues, la fe la certeza de lo que se
espera, la convicción de lo que no se ve”
Esta definición lo desglosaré en tres partes:
1.
Es pues la fe..
La fe es. Es, no
será. Es en el presente, no en el futuro. Es ahora, no en el mañana. La fe es
ahora.
En relación a la sanidad ¿Cómo es la
fe para sanidad y milagros?
En primer lugar
debemos estar seguros que la sanidad es la voluntad de Dios. Dios quiere sanar
los enfermos.
Mateo 8: 1 - 3 dice:
“Y he aquí vino un leproso y se
postró ante él, diciendo: Señor, si
quieres, puedes limpiarme. Jesús extendió la mano y le tocó, diciendo: Quiero; sé limpio. Y al instante su
lepra desapareció”
Ahora vamos: La fe es del presente. La esperanza es del mañana. Para que las
sanidades y milagros ocurran necesitamos tener fe para el ahora. Si tú dices:
“Yo creo que el Señor me sanará mañana, o algún día”, eso no es fe porque no
está en el presente. La fe del presente dice: “Estoy sano ahora”.
Ejemplos:
Ejemplos:
El centurión romano:
Mateo 8: 5 – 8, 13 “Entrando Jesús en Capernaum, vino a él un
centurión, rogándole, y diciendo: Señor, mi criado está postrado en casa,
paralítico, gravemente atormentado. Y Jesús le dijo: Yo iré y le sanaré.
Respondió el centurión y dijo: Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo;
solamente di la palabra, y mi criado
sanará.
"Solo di la
palabra, y mi criado sanará " El centurión le estaba diciendo al Señor:
“Solo suelta la palabra y se producirá el milagro. El versículo 13 dice: “Entonces
Jesús dijo al centurión: Ve, y como creíste, te sea hecho. Y su criado fue sanado en aquella misma hora”
Para ver los
resultados inmediatos a nuestra oración, la fe tiene que ser puesta en el
presente, no en el futuro.
Los enfermos sanados
Mateo 8: 16 -17
dice:
“Y cuando llegó la noche, trajeron a
él muchos endemoniados; y con la palabra
echó fuera a los demonios, y sanó a todos los enfermos; para que se
cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo: El mismo tomó nuestras
enfermedades, y llevó nuestras dolencias”
Al instante que
declaras la palabra, al instante que sueltes la palabra, debes creer que el
milagro sucederá:
“Porque de cierto
os digo que cualquiera que dijere a este monte: Quítate y échate en el mar, y
no dudare en su corazón, sino creyere que
será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho”, Marcos 11:23.
2.
La certeza de lo
que se espera
Es decir, que lo
que esperas para mañana, lo consideras un hecho hoy, eso quiere decir que lo
tienes que evidenciar con tus acciones. Si
crees, actúa como si lo que esperas ya lo tuvieras.
Ejemplos:
Ejemplos:
Ana, la madre del profeta Samuel
1 Samuel 1: 18: “Y
ella dijo: Halle tu sierva gracia delante de tus ojos. Y se fue la mujer por su
camino, y comió, y no estuvo más triste.
Y levantándose de mañana, adoraron delante de Jehová, y volvieron y fueron a su
casa en Ramá. Y Elcana se llegó a Ana su mujer, y Jehová se acordó de ella”
La clave aquí es
que luego de su oración y la bendición sacerdotal para su vida Ana comió, y no
estuvo más triste, es decir, actuó como
si Dios ya lo había respondido y al día siguiente ella concibió.
La alimentación de los 5000
Mateo 14: 17-20
“Y ellos dijeron:
No tenemos aquí sino cinco panes y dos peces. El les dijo: Traédmelos acá.
Entonces mandó a la gente recostarse sobre la hierba; y tomando los cinco panes
y los dos peces, y levantando los ojos al cielo, bendijo, y partió y dio los
panes a los discípulos, y los discípulos a la multitud. Y comieron todos, y se
saciaron; y recogieron lo que sobró de los pedazos, doce cestas llenas”
En la alimentación
de los 5000 se nos enseña a actuar como si ya lo tuviéramos. Jesús oró por los cinco panes y dos peces, dio
gracias al Padre, y partió el pan, estaba
seguro que el pan de multiplicaría y que todos comerían.
Actúa como si ya tuvieras
la respuesta. La fe es la certeza de lo que se espera, quiere decir que debes accionar
como si la bendición que pediste, por la que estás orando, créelo que ya lo
tienes, que ahora una realidad.
"Se sed hacedores de la palabra y no tan solo oidores…" Santiago 1: 22
3. La convicción de lo que no se ve.
Es decir, que tú ves con tus ojos de la fe, ves que es un hecho. Ves lo que otros no ven.
"Se sed hacedores de la palabra y no tan solo oidores…" Santiago 1: 22
3. La convicción de lo que no se ve.
Es decir, que tú ves con tus ojos de la fe, ves que es un hecho. Ves lo que otros no ven.
“Caminamos por la
fe, no por la vista”, 2 Corintios 5: 7
Ejemplos:
Elías ve una gran lluvia en la
pequeña nube
1 Reyes 18: 44: “A
la séptima vez dijo: Yo veo una pequeña nube como la palma de la mano de un
hombre, que sube del mar. Y él dijo: Ve,
y di a Acab: Unce tu carro y desciende, para que la lluvia no te ataje”
Elías vio una gran
lluvia en una pequeña nube.
Noé construyó el arca cuando aún no
llovía sobre la faz de la tierra.
Génesis 6: 17 “Porque voy a enviar a la tierra un diluvio
de agua que destruirá todo lo que tiene vida bajo el cielo”. Noé cuando construyó el arca cuando en su tiempo no llovía. Hablar de un diluvio era una locura. Pero Noé contra todo pronóstico construyó el arca.
“Y por esa fe
condenó al mundo”
Hebreos 11: 7: “Con temor preparó el arca en que su casa se salvase; y por esa fe condenó al mundo…”
Jorge Arévalo
Comentarios
Publicar un comentario