Los jóvenes escolares, aquellos que están en los tres últimos
años de la secundaria, requieren de oportunidades para ir formándose como
hombres de bien y de proyectar su vida hacia un futuro mejor. Ellos serán el
motor de la economía del país, representan la fuerza, el liderazgo y el
emprendimiento de lo que será el Perú en los años por venir. Por tal
razón se requiere que se les apoye en todo sentido. El estado, sobre todo, debe
de propiciar un ambiente seguro y de esperanza para ellos, y que en esta tierra
es donde pueden desarrollarse y empezar a surgir.
A continuación presento un sinnúmero de programas que favorecen la participación de la juventud en edad escolar, próximos a enfrentar el mundo y las realidades sociales. Las situaciones negativas que muchos de ellos viven cada día se verán afirmados sino encuentran espacios de participación dónde puedan mostrar sus cualidades y talentos personales y contribuir de manera positiva con su servicio a la nación.
Programas de Participación
Se mencionó que los jóvenes debían proyectarse a ser los
protagonistas del cambio del país, de liderar de una manera diferente con
valores como la honestidad y fortalecer los modelos de unidad familiar. Veamos
los programas de participación:
Escuelas de Líderes
A través de las Escuelas de Líderes conoceríamos a los nuevos
emprendedores, a esa población económicamente activa (PEA) que se parece a un
ejército bien entrenado y motivado para conquistar su futuro superando la
pobreza y la estrechez económica heredada de sus padres. La
participación de los jóvenes en la Escuela de Líderes les daría esta clase de
formación que les enseñe a no mirar al Estado como su dios, sino que cada uno
de ellos desarrolle una visión productiva independiente y de prosperidad, que
afecte sus vidas y por ende la de sus familias. Cursos, talleres y conferencias
de economía libre y de emprendimiento personal les ayudará a desarrollar esta
mentalidad.
Programa Patrullas Juveniles
También mencionamos programas específicos que pretenden ser
alternativas al accionar de las barras bravas y las pandillas juveniles en los
barrios convulsionados, los llamados zonas rojas de los distritos, allí el
programa preventivo de las Patrullas Juveniles de la PNP (Policía Nacional del
Perú) y el Club de amigos deben ser fomentados.
Los jóvenes necesitan tener nuevas asociaciones donde
aprovechen su tiempo libre haciendo un voluntariado para cosas provechosas,
programas creados por el Ministerio Público como “Fiscales escolares”, o
Municipios Escolares” o Parlamento Joven del Congreso de la República, así como
otros, les proveen los espacios de aprendizaje que les impulsarán hacia su
propio desarrollo.
Programa de Justicia Juvenil Restaurativa
Mencionamos también el programa de Justicia Juvenil
Restaurativa que es un programa que tiene por finalidad compensar los daños
ocasionados a sus víctimas. Este programa puede ayudar a disminuir las
infracciones, faltas y delitos en la sociedad.
Programa “Habla Franco”
Este programa ayuda a los chicos y chicas a recuperarse de las drogas. El programa sirve con profesionales especializados en el trabajo de prevención de estupefacientes. Debe ser articulado con otros actores de la sociedad como los centros educativos y centros de rehabilitación de drogadictos.
La tarea es ardua pero apasionante, si existe un interés genuino por
comprometerse a velar por los problemas de los jóvenes desde las escuelas,
estoy seguro que seremos grandemente recompensados.
Hago un llamado a las instituciones educativas, a los programas de trabajo y empleo que se fomentan desde el estado, a los programas sociales de las iglesias, de las asociaciones civiles y empresariales, les propongo convertirse en aliados estratégicos para los adolescentes y jóvenes del país que han empezado a buscar su paz y bienestar dentro de la sociedad.
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